En tiempos de fútbol…. camaleones
Mientras la pelota corre a patadas de zánganos que cobran demasiado y son de moco fácil cuando pierden (se les secan rápido, supongo, cuando arrancan el Maserati para irse a casa tras la derrota), la vida del jardín procede plácida bajo los primeros calores del verano. ¡Qué luz y qué aire tan preciosos! Pues no, Leer más …